En la División de Apoyo al Ministerio Público de la Policía Nacional del Perú (PNP) permanece estancada la investigación contra los oficiales y efectivos que dirigieron, organizaron y participaron en la represión contra las personas lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTBI), durante la acción pública pacífica conocida como “Besos contra la homofobia”, el último 13 de febrero. 

La denuncia fue presentada el 1 de julio de este año, por los presuntos delitos contra la Humanidad (discriminación agravada), contra la libertad (prohibición de reunión pública lícita), contra la administración pública (abuso de autoridad) y contra la vida, el cuerpo y la salud (lesiones leves). Sin embargo, a la fecha no se ha citado a ninguno de l@s cinco agraviad@s.

Las personas que resultaron heridas fueron: Carlos Polo, a quien los policías empujaron con escudos, la golpiza le lastimó el codo, y luego de que un policía lo jalara de los cabellos desde atrás, le lanzaron gas pimienta. A Oliver Carrasco, lo patearon en el suelo y lo golpearon en el rostro con escudos. A Alexander Carrasco, un policía de apellido Vásquez lo golpeó en los genitales con la rodilla y otro lo agredió en el brazo con una vara. A Stefany Rodriguez la golpearon en el cuerpo y a Fiorella Gil Mena, periodista del portal digital Sin Etiquetas, un policía le rompió la ceja con su escudo. Al momento del golpe le dijo: “…Mejor váyanse que les irá peor…”.

“Hay un desconocimiento quizá adrede de los derechos de los ciudadanos desde las más altas instancias del Estado, y una propensión a pensar que los ciudadanos LGTBI tienen menos derechos que el resto de la población. Se piensan que si se manifiestan o expresan públicamente hay que enderezarlos con rigor. Uno de los caminos que tenemos para enfrentar acciones odiosas es la denuncia para erradicar desde el Estado y sus agentes esta violencia”, señaló Víctor Álvarez, abogado de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos y l@s denunciantes.

Pero, este no es un hecho aislado. El fin de semana último, nuevamente la Policía Nacional del Perú discriminó y violentó a ciudadan@s LGBTI en aras de normas y políticas de seguridad que no tienen amparo constitucional y no se ajustan a los estándares internacionales de derechos humanos.

“La policía que tiene como función garantizar la seguridad y cuidarnos, nos grita, nos ofende, nos insulta. “Váyanse maricones de m…”, “seguro te falta un hombre”, nos dicen a las lesbianas, nos tiran gas pimienta en la cara. Es indignante que permitan que se haga una vigilia por un expresidente que está preso por crímenes como Fujimori y a nosotros nos impidan hacer una vigilia por nuestros muertos que son víctimas del Estado”, señaló Toto Alvarado, vicepresidenta del Movimiento Homosexual de Lima (MHOL) e integrante la Plataforma Nuestras Vidas Importan que convocó a la vigilia.

MINISTRO SE EQUIVOCA

Pese a que la policía se sumó a la movilización #Niunamenos la violencia sigue arreciando y desalojó con violencia a los activistas que participaron en la vigilia del 17 de setiembre. Como resultado, uno de ellos fue trasladado a una clínica del centro de Lima donde le suturaron una herida provocada en el rostro por un golpe con vara policial.

Totalmente opuesta fue la actitud del cuerpo policial el miércoles 14 cuando un sector fujimorista pedía en vigilia fuera de la Catedral de Lima la liberación de su líder. El ministro del Interior, Carlos Basombrío, justificó la golpiza a los LGTBI señalando que la plaza de Armas es “zona rígida” cuando desde el 2005 el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional esa disposición de la Municipalidad de Lima.

“Aún si suponemos que la plaza de Armas es un lugar restringido, no hay justificación para la violencia y lesiones a la integridad personal. Nos corresponde visibilizar esta investigación que requiere de la intervención oportuna y rigurosa con celeridad y respeto a los derechos de los LGTBI”, sostuvo el abogado Víctor Álvarez.

“Me parece gracioso que el ministro Basombrío diga que para unos hay justicia y para otros no. Porque se dio permiso a los fujimoristas para una vigilia y a nosotros por lo mismo nos rompen la cabeza de un palazo. Somos peruanos, merecemos el mismo respeto que todos y todas, y esperamos que el presidente de la República se pronuncie con firmeza por nuestros derechos”, manifestó Toto Alvarado.